Cómo comenzar con email marketing

¿Email marketing? ¿De verdad? ¿Alguien todavía hace eso?

Pues sí, y la verdad es que es muy efectivo si lo hacemos de la manera correcta.

Por ejemplo, de los profesionales encuestados por eMarketer un 80% afirmó que el email era el mejor canal para adquirir y retener a sus clientes. Además, a la hora de hacer negocios, 86% de las personas prefiere comunicarse a través de email.

Una y otra vez reportes presentan al email marketing como el canal con el mejor ROI. Y es que el email es una vía directa a la persona que queremos llegar. Al contrario de las redes sociales o publicidad online que son canales menos personalizados.

Entonces, ¿estás listo para comenzar?

¿De dónde salen las direcciones de email?

Antes de avanzar más con el tema, es importante dejar claro de dónde sale la lista de direcciones a la que enviaremos nuestros emails.

Si bien existen formas de pagar por listas de emails, esto no es lo más recomendable. Para comenzar es una estrategia poco ética, ya que estarías accediendo a un espacio personal sin que quien recibe te haya dado su permiso.

El actuar sin el consentimiento de tus destinatarios tendrá una consecuencia negativa que todo negocio debe evitar: existirá una falta de confianza. “¿Quién es esta persona que me escribe? ¿Será un virus?”. La confianza una vez perdida es muy difícil de recuperar.

Además, cuando envías correos masivos a desconocidos lo más probable es que te denuncien como spam. Y tener un gran número de denuncias afectará la reputación de tu IP y de tu dominio. Sí, el dominio completo, no solo la cuenta de email que estás usando. Si quieres verificar tu reputación, puedes hacerlo aquí aquí.

Entonces, ¿qué hacer?

Comienza a crecer tu lista de emails poco a poco. Incluye por ejemplo en tu página web un formulario para que las personas se suscriban a un Newsletter, existen herramientas como SumoMe muy fáciles de utilizar.

Adicionalmente a tu página web, aprovecha otros canales digitales como las redes sociales o webinars para encontrar suscriptores. Y recuerda que en el mundo físico también puedes encontrar suscriptores, por ejemplo, personas que participen en una actividad que organices.

Dependiendo de tu estrategia y de lo que busques con tu lista de emails, tal vez este comienzo te parezca un poco lento. Sin embargo, muchas veces es mejor tener listas de email más pequeñas, pero con usuarios fieles.

Tipos de emails

Hasta ahora hemos hablado de lo efectivo que es el email marketing y de lo importante de trabajar en una lista de emails propia, pero… ¿a qué se refiere email marketing exactamente?

A toda comunicación por email que establezcamos con un cliente o un cliente potencial, ya sea para promover nuestros productos y servicios o para establecer cualquier tipo de relación con estos.

Con esta definición en mente, podemos establecer 4 tipos de emails:

Personales.

Newsletters.

Promocionales.

Transaccionales.

Personales

Son los correos que se envían uno a uno. Este es el tipo de email que envías cuando te escribe directamente un cliente preguntando información o que escribes a potenciales clientes cuando se han descargado un contenido específico de tu página.

Son emails personalizados. Usualmente podemos dirigirnos a la persona por su nombre, y que no necesitan de un gran diseño. Lo que sí necesitan es ser claros y directos. Deben responder a todas las preguntas del cliente o cliente potencial. Asimismo, deben dejar claras las vías para obtener más información de ser necesario.

Incluye en la firma tus datos de contacto y tu página web. Si lo deseas, incluye también tus redes sociales o algún otro proyecto que desees destacar.

Hoy en día los CRM han ayudado a automatizar este tipo de emails cuando hablamos de listas masivas. Por ejemplo, se podría utilizar un CRM para definir una secuencia personalizada de emails para las cientos (o más) de personas que se descarguen un ebook, de acuerdo a su comportamiento.

Newsletter

Este tipo de emails tiene como finalidad transmitir al lector una información de su interés, pero no ligada a la venta.

Cuando nos suscribimos a un blog y recibimos las actualizaciones periódicamente, estamos recibiendo un newsletter (por cierto, para suscribirte al newsletter de Mauna haz clic aquí).

En esta caso, el contenido visual es más relevante que en el anterior; sin embargo no es la pieza fundamental. Lo más relevante en este caso es que el contenido sea útil para quien o recibe.

En cualquier caso, busca crear contenido que te diferencie del resto. Toma como por ejemplo el newsletter escrito a mano de Think Clearly.

Promocionales

Estos son los emails de ventas directamente. Funcionan muy bien para cuando tenemos alguna promoción que queramos anunciar o para dar descuentos a nuestros suscriptores.

En estos emails el diseño visual sí es fundamental. Aquí, un buen diseño determinará la cantidad de clics hacia la página de venta de tu producto o servicio. Y para los clientes que ya conocen tu marca y tu estilo, incluso influirá en la apertura de los correos. Por ejemplo, nunca dejo de abrir los correos de L’Occitane, solo porque quiero ver con qué me sorprenderán esta vez…

En este caso sí queremos vender. Así que facilítaselo al lector. Incluye botones y CTA que lleven directamente a la página del producto. Indica claramente cuál es el beneficio que das: si es un porcentaje de descuento, estás bajando un precio fijo, son productos que todavía no están en el mercado, etc.

Transaccionales

¿Recuerdas esos correos electrónicos que recibes cuando haces una compra en línea?¿O en los que te piden que confirmes tu suscripción? Esos son los correos transaccionales.

Son muy utilizados y extremadamente relevantes en los negocios de ecommerce.

¿Cómo puedes estar seguro de que esa reserva de hotel que hiciste está bien? Pues porque te llega un email indicándote que la reserva se ha hecho correctamente.

Si tu negocio no tiene un componente digital, como una tienda online o un servicio al que los usuarios puedan acceder a través de la web, solo necesitarás unos pocos.

Este tipo de correos debe ir al grano. Cuando la persona reciba el email, le debe quedar claro por qué lo está recibiendo y cuáles son los pasos a seguir.

Si por ejemplo, debe tomar algún tipo de acción como confirmar su dirección de email, debe existir un CTA que lo ayude a tomar este siguiente paso. No es recomendable incluir mucha más información que pueda agobiar al lector. Si quieres incluir algún otro link que consideres relevante puedes hacerlo, pero asegúrate de que exista una jerarquía visual que distinga lo más importante.

Herramientas de email marketing

Con los tipos de correo electrónicos claros y los objetivos que persigue cada uno, solo debes cruzar este conocimiento con tu estrategia de marketing. Esto te permitirá establecer qué emails mandar y cuándo dependiendo de las metas que te hayas establecido.

Lo que sigue en nuestra estrategia de email marketing es encontrar las mejores herramientas para enviar nuestros correos electrónicos.

En cuanto a los CRMs que ya mencionamos antes, uno de los más populares es Hubspot y además tiene muchas funcionalidades gratis.

Por otro lado, en el mundo de las herramientas de email marketing, la más utilizada es Mailchimp, en parte por lo amigable y fácil de usar, y en parte porque hasta los 2000 suscriptores la herramienta es gratuita. Otra herramienta que no tiene componente gratuito, pero está muy enfocada en la calidad del diseño de los emails es Campaign Monitor (y con un blog de contenidos de email marketing de excelente calidad).

Por último quiero dejarles un par de herramientas que son muy útiles para probar sus emails. Una vez entres en este mundo de email marketing descubrirás que todos los dispositivos, aplicaciones, etc. muestran tus emails de forma diferente. Para asegurarte de que todo está bien, puedes hacer pruebas utilizando Litmus. Y si quieres ver lo que verá tu suscriptor en la bandeja de entrada de su teléfono movil prueba esta aplicación.

Principales métricas del email marketing

Bien, ya sabes lo básico para enviar tu primera campaña de email, pero ¿qué debes ver? ¿cómo sabrás si tuvo éxito?

El éxito depende mucho del objetivo de tu campaña. Si por ejemplo tu objetivo era promocionar ciertos productos con cierto cupón de descuento, las ventas de estos productos con el cupón serán un claro indicador del éxito de tu campaña. Ahora bien, si estamos hablando de un newsletter puedes tomar como éxito un clic hacia uno de los artículos de tu blog.

En email marketing cada paso que da el suscriptor es medible, por eso debes estar atento a todos:

Tasa de rebote (emails recibidos/emails enviados):

Esta tasa será un indicador de lo sana que esté tu lista de email.

Tasa de apertura (emails abiertos/emails recibidos):

De todos los emails enviados, cuántos fueron abiertos. Esta tasa se suele mejorar trabajando en los asuntos de los correos electrónicos que envías. Pero también será un indicativo de que tu contenido puede estar aburriendo a tus suscriptores (ya saben lo que encontrarán dentro), estás enviando demasiados o muy pocos emails, o tienes una lista con suscriptores que ya no están interesados.

Tasa de clic (emails con clics/emails abiertos):

Para esta tasa existen diferentes corrientes. Hay personas que prefieren calcularla utilizando el número de emails recibidos en lugar de los emails abiertos. Si decides utilizar esta segunda opción, lo más probable es que tu tasa de clics sea inferior al 10%. Esto no quiere decir que haya nada malo, sino que la métrica que estás usando para calcular la tasa te lleva a ese resultado. El usar una u otra depende de ti, las dos formas te pueden dar información útil. En el caso de que tengas una tasa de clics baja, debes trabajar en el diseño y el contenido para hacerlo más interesante y más claro para tus suscriptores.

Bajas (número de personas que abandonan la lista):

Con cada envío que hagas, encontrarás personas que te abandonan. Es importante que siempre incluyas un enlace para dar esta opción a tus suscriptores. No solo porque Mailchimp no te permitirá enviar tu correo, sino porque es una forma de mantener tu lista sana.

Todas estas métricas suelen estar incluidas en cualquier software o aplicación para envío de correos masivos como las que mencionamos en la sección anterior.

Ahora te toca a ti…

Te hemos dado los conocimientos básicos para que puedas comenzar a trabajar en campañas de email marketing:

Crea tu propia base de datos poco a poco.

Conoce los diferentes tipos de email: personales, newsletters, promocionales y transaccionales.

Utiliza herramientas que te faciliten la vida.

Mide las métricas que te ayuden a saber si estás alcanzando tus objetivos.

Si quieres saber más o que desarrollemos en más profundidad alguno de los puntos, no dudes en contactarnos.