¿Cómo diseñar un logo, una web o un poster de forma original? La originalidad es el santo grial de la creatividad. Pero, ¿existe la verdadera originalidad en el diseño o siempre está influenciada por lo que vino antes?
Hay que ser honestos: la creatividad es un paisaje nebuloso. Con la evolución de las tecnologías digitales, ahora estamos expuestos a las opiniones, ideas y trabajo de otras personas casi minuto a minuto. Entonces, ya sea por su originalidad de pensamiento o su brillantez artística, la gran escala de aportes visuales y conceptuales que experimentamos a diario puede desdibujar las líneas entre donde termina tu idea y comienza la mía. En palabras sencillas, «embasurar» nuestra mente hoy, es mucho más fácil que antes.
Pero aquí está la cuestión: los humanos no podemos tener nuevas ideas sin una entrada sensorial previa. No soy yo; es ciencia, y así es como funciona nuestro cerebro. Desde compositores hasta filósofos y magnates de la tecnología de hoy en día, algunas de las mentes más brillantes de este siglo han observado que los grandes artistas mezclan, re-contextualizan y construyen sobre ideas que ya existen para crear obras que inspiran e influyen a otros.
El gran compositor Igor Stravinsky dijo una vez que «un buen compositor no imita; él roba», mientras que Steve Jobs se hizo eco de esta máxima en su declaración de 1996 de que «los buenos artistas copian, los grandes artistas roban».
«Tu mente es como una colección de bloques de LEGO. No puedes conjurar estos bloques de la nada, se acumulan a través de diferentes experiencias e influencias»
¿Aún no estás convencido? Está bien, probemos esta hipótesis. Intenta dibujar un animal, un vegetal o una fruta que no existe; terminarás con algunos dibujos extraños, pero cada uno de ellos será una combinación elaborada de elementos que has visto antes.
En resumen, tu mente es como una colección de bloques de LEGO. No puedes conjurar estos bloques de la nada, se acumulan a través de diferentes experiencias e influencias, pero puedes copiarlos, transformar su forma y tamaño y combinarlos de nuevas maneras para crear nuevas ideas. El diseño funciona exactamente de la misma manera. Cuantos más elementos básicos tengas al comenzar, más objetos puedes crear potencialmente y más complejo será cada objeto. La pregunta obvia es: ¿cómo y dónde puedo conseguir más de estos bloques?
Aunque suene un poco rudo, la respuesta es: puedes robarlos.
Ok, ok. No estoy sugiriendo que realmente los robes. Pero me gustaría compartir algunos consejos y trucos para tomar inspiración creativa en los aspectos visuales, funcionales y conceptuales del diseño en base a mis propias experiencias como diseñador gráfico y web.
Cómo diseñar tomando inspiración de otros e impulsar tu creatividad
1. Explora los elementos visuales.
Puede parecer un oxímoron, pero tomarse el tiempo para estudiar regularmente los componentes básicos del diseño visual (en el caso del diseño web), como botones, objetos y la miríada de usos de los principios Gestalt en los diseños, te ahorrará tiempo a largo plazo.
Quizás esto te parezca irrelevante porque usas un sistema de diseño en el trabajo y rara vez creas patrones desde cero, o sientes que simplemente no tienes tiempo para refinar tus diseños de interfaz de usuario (UI). Si bien puedo entender este razonamiento, no estoy de acuerdo con esta mentalidad, particularmente cuando se trata de dominar los aspectos más granulares del diseño de la interfaz de usuario.
El refinamiento de la interfaz de usuario suele consumir la mayor parte del tiempo. Para reducir su impacto en la carga de trabajo, hay que tomar medidas prácticas para fortalecer la sensibilidad de diseño. La creación de maquetas de diseños que admires puede ayudarte a reunir una mayor colección de artefactos de diseño visual en los que puedas basar tus diseños cotidianos: cuanto más practiques, más rápido podrás completar tus propios entregables. El tiempo es precioso cuando eres diseñador y las pequeñas cosas como medir la distancia entre los botones o calcular el margen perfecto se suman. Pero si has visto miles de diseños similares, puedes ensamblar rápidamente tu colección de bloques de LEGO para formar un diseño innovador y efectivo en la mitad del tiempo que tomaría comenzar desde cero.
2. Identifica diseños funcionales ganadores.
Una vez que hayas expandido tu biblioteca visual, es el momento de profundizar, yendo más allá de la estética a la mecánica de tus diseños. La recopilación de soluciones, la identificación de características útiles y la observación de productos innovadores te permitirán producir soluciones viables más rápidamente.
Mantenerte informado de las mejores prácticas te permite mezclar elementos que has recogido en el camino y aportar nuevas soluciones que, a su vez, influyen en otros diseñadores y estilos. Examinar cómo abordan los problemas de otras empresas te facilitará la creación de una selección y combinación de referencias útiles para abordar los problemas en los que estás trabajando. Probablemente ya lo hagas, pero te recomiendo encarecidamente que veas lanzamientos de productos, te registres para betas y asistas (¡virtualmente!) a eventos tecnológicos. Con el tiempo, descubrirás que este enfoque hace que la resolución de problemas complejos sea menos exigente.
3. Examina los principios básicos.
En este nivel, está examinando los principios básicos que sustentan las soluciones, las funciones y el tratamiento visual de los productos que admiras o disfrutas usar en tu vida diaria.
No te limites a través de la industria o el medio cuando tratas de ampliar tu comprensión de los conceptos de diseño. Las experiencias de la vida real y las personas pueden aportar soluciones. De hecho, en su libro Steal Like an Artist, el escritor Austin Kleon señala que, «Existe una teoría económica que dice que si tomas los ingresos de tus cinco amigos más cercanos y los promedias, el número resultante estará bastante cerca de tus ingresos. Creo que lo mismo ocurre con los ingresos de las ideas. Solo vas a ser tan bueno como las cosas con las que te rodeas».
Consejos para el design thinking crítico:
La variedad es clave para impulsar el pensamiento creativo. Más que eso, salir de tu rutina y tu entorno puede ayudarte a encontrar conexiones entre cosas aparentemente no relacionadas. Según el gerente de productos de IDEO, David Acyan, esta forma de experimentación es uno de los seis elementos esenciales de la creatividad. Aunque puede ser difícil identificar el razonamiento o la psicología detrás de un producto en el que no estás trabajando, es posible.
A continuación algunos consejos para desarrollar este estilo de pensamiento de diseño crítico:
- Cuestionar todo. Comenzando con tu trabajo, pregúntate por qué funciona de esa manera y cuestiona el fundamento detrás de decisiones aparentemente obvias. Lee blogs de productos que te ayudarán a ampliar tu comprensión de la lógica del diseño. Uber, Google, Netflix, Mapbox y Spotify han escrito excelentes artículos sobre su proceso de diseño. Si dedicas suficiente tiempo a investigar productos y la historia de la empresa, aprenderás sobre el «por qué» detrás del producto y cómo se llegó a su versión actual.
Un ejercicio simple que puedes hacer para practicar es intentar mapear el modelo Kano de una empresa desde la primera iteración hasta el producto existente, examinando el cambio en los placeres y satisfactores a medida que evolucionó el producto. - Aplica principios recién descubiertos a tu trabajo. Por ejemplo, echa un vistazo a la aplicación Uber. Tiene una interfaz de usuario elegante y, en su superficie, el diseño parece simple, pero hay más en esta aplicación, más allá de la estética.
De hecho, existe un principio conocido como «Aversión a la inactividad» en funcionamiento entre bastidores que establece que las personas son más felices cuando están más ocupadas, incluso si se ven obligadas a estar ocupadas.
El problema más importante de los clientes de Uber es la espera, y aquí es donde entra en juego el fundamento de su diseño. La interfaz de Uber proporciona al usuario animación, gamificación y elementos visuales para involucrarlos e informarlos mientras esperan su viaje. Quizás trabajes en salud digital o fintech en lugar de en transporte, pero conocer este principio te permitirá aplicarlo en tu industria para mejorar tu experiencia de usuario.
Ahora te toca a ti.
Róbalo antes de que lo necesites. Cuando se trabaja en un problema, es natural buscar inspiración en tus competidores y soluciones similares. Pero el punto que estoy tratando de hacer es robar esta inspiración antes de que la necesites.
A través de la exploración regular de influencias de diseño aparentemente dispares, seleccionarás una biblioteca eficaz de patrones, soluciones e ideas que se expanden mucho más allá del espacio de tus competidores. Cultivar este lenguaje visual proporciona la fluidez necesaria para remezclar y re-contextualizar tus influencias para producir un trabajo original.
Digital Marketing Manager en Orienteed. Consultor en Estrategias de Inbound Marketing y Comunicación Digital. Diseñador Web, especializado en Usabilidad y UXp. Coach Ontológico Profesional certificado. Ex Co-Fundador de Mauna Media.